by SWAMI KURMARAJADASA on LUN, 01 OCT 2012
La palabra AyurVeda deriva de dos palabras sánscritas Ayur que significa vida y Veda que significa ciencia o conocimiento.
El AyurVeda es, por tanto, una ciencia completa basada en el equilibrio de los tres doshas (Vata, Pitta y Kapha) o los tres humores del cuerpo.
El AyurVeda es la ciencia de la vida y cree en dos principios científicos: lo similar aumenta lo similar y lo opuesto disminuye lo opuesto. Usa ambos para tratar las enfermedades dependiendo de la necesidad de aumentar o disminuir los doshas causantes de la enfermedad.
El AyurVeda no cura nada, te ayuda a mantenerte sano y fuerte toda la vida.
El AyurVeda es la medicina de la India que usa un modelo constitucional basado en la naturaleza física y mental de cada persona. Sus objetivos son proveer una guía acerca de la dieta y estilo de vida para que las personas se mantengan sanas y las personas con problemas de salud puedan mejorarla. El AyurVeda tiene varios aspectos que la hacen única:
- Sus recomendaciones acerca de la dieta y el estilo de vida personales para cada indivíduo.
- En el AyurVeda todo se confirma con la observación, la interrogación, la examinación directa y el conocimiento extraído de los antiguos.
- Conoce las fuerzas energéticas que influyen a la naturaleza y a los seres humanos. Tales fuerzas se llaman tridoshas, cuando actúan conjuntamente o doshas, cuando están separadas. A diferencia de la soberbia medicina occidental presta atención especial al resto de ciencias.
El AyurVeda sólo usa medicinas naturales encontradas en la Naturaleza.
El AyurVeda es el primer sistema que estudia el cuerpo, la mente y las emociones de la persona para diagnosticar las enfermedades, tratando los factores que las causan y no sólo los síntomas de las mismas, utilizando medicinas totalmente naturales. La clave para comprender la medicina AyurVédica es entender que cada uno de nosotros nace con una constitución única y determinada por los tres doshas o energías vitales del cuerpo: gas (Vata), ácido (Pitta), mucus (Kapha), y cómo se relaciona su constitución con estos doshas que hacen posible las funciones del cuerpo: Vata, movimiento; Pitta, metabolismo; Kapha, masa corporal.
Unos doshas equilibrados es la mejor defensa contra cualquier enfermedad.
Si funcionas bien, las enfermedades no podrán arraigar, pero cuando el cuerpo se desequilibra puede caer enfermo. Para mantener el equilibrio de los doshas y prevenir las enfermedades, la medicina AyurVédica recomienda una dieta equilibrada, ejercicio moderado, trabajo sin estrés y una felicidad sin límites. La prevención es su máxima. Existen tratamientos para evitar los efectos secundarios de la menopausia; tratamientos de longevidad y rejuvenecimiento celular, y de preparación para una vejez más sana. El AyurVeda también ofrece tratamientos de belleza natural para equilibrar la piel del cuerpo y de la cara evitando el envejecimiento prematuro.
Un poco sobre la historia del AyurVeda
Hace más de 8.000 años, en el Himalaya, hubo un gran congreso de científicos de todas las ciencias y conocimientos que creó un sistema médico para prevenir y curar las enfermedades, a esta ciencia nueva se le llamó medicina AyurVédica o ciencia de la vida. En un principio estaba unida a la filosofía Sivaíta pero en esa época los sabios creyeron que sería positivo separarla. Un conocimiento en manos de todos que se transmitía de padres a hijos. Buda fue quien popularizó esta medicina creando universidades, fomentando la investigación científica y publicando libros sobre medicina AyurVédica, como el Charaka Samhita que, aún hoy en día, son la base para el estudio de esta ciencia.
Una medicina integral con más de 8.000 años de antigüedad.
La medicina asiática (Medicina Tradicional China y Tibetana, Acupuntura…) o la medicina natural (Homeopatía, Masajes…) han sido influenciadas por el AyurVeda a través de los años. Mientras en occidente un médico se diferenciaba poco de un carnicero y los tratamientos eran a base de sangrías, sanguijuelas, etc. en oriente la medicina era sutil y refinada. Nuevos descubrimientos arqueológicos han demostrado que en las civilizaciones de Mehrgarh y Valle del Indo, más allá del 2500 a.n.e., ya se realizaban complejas intervenciones quirúrgicas; mientras, en Europa, los curitas, hasta poco menos de 600 años, quemaban a los gatos por considerarlos diabólicos ignorando la evidente consecuencia de la peste bubónica, traída por las ratas, que diezmó la población hasta hacerla casi desaparecer. No sólo eso, científicos como Miguel Servet, Galileo o Copérnico fueron quemados vivos por los abominables crímenes del descubrimiento de la circulación sanguínea, la redondez de la Tierra o la traslación alrededor del Sol respectivamente. Aún el siglo XXI una soberbia generalizada deambula por altas esferas alopáticas incapaces de reconocer una sabiduría milenaria.
La medicina, farmacología y psicología de la actualidad, la del supuesto primer mundo, todavía está en pañales.
Adornada por una tecnología interestelar pero con alopáticos que no se diferencian mucho de los Medievales. El ornatus sólo sirve para justificar una vanidad que será admirada por los ignorantes. Por si esto no fuera poco, deberíamos añadir la ética del Sistema, más interesada en mantenerte enfermo que en curarte. La violación del juramento Hipocrático es un grandísimo negocio. Quizá sea esa la razón principal para no reconocer esta sabiduría milenaria.
Hoy en día, algunos alopáticos (médicos, farmacólogos y psicólogos) intentan volver en silencio a su punto de partida: la sabiduría del AyurVeda. Las razones para ello son muchas, pero en particular, muchos pacientes y médicos intentan evitar los efectos dañinos que causan las drogas vendidas bajo receta. Drogas que “curan” algo pero dañan muchas otras cosas. Algunas como el Prozac que te invitan, sigilosamente, al suicidio.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Gracias por tu Participación